De manera general, una obra de arte suele tener unas dimensiones fijas, por lo que casi siempre responderá "No" a la pregunta de si su obra tiene unas dimensiones variables.

Sin embargo, en algunos casos una misma obra puede tener diferentes dimensiones.

Por ejemplo:
- una instalación artística puede componerse de diversos elementos que pueden colocarse de manera diferente sobre el suelo o en el espacio. En este caso, cada colocación diferente hace variar la dimensión total de la obra.
- Una escultura puede producirse en varios ejemplares y a diferentes escalas.
- Una fotografía puede revelarse en papel, en varios ejemplares, a diferentes escalas.